Es común en nuestro día a día asociar inconscientemente conceptos al género de las personas. Comentarios como ‘ese trago es de mina’ o ‘escoge algo más de hombre’ fortalecen esta idea y lamentablemente, generan esquemas de cómo una mujer o un hombre debe comportarse cuando son ellos mismos quienes deben decidir cómo hacerlo. Al no hacer nada, se aporta indirectamente a que esto ocurra.